En la tarde de ayer, tuvo lugar en la Casa del Cofrade, en Zamora, la presentación del libro del Santo Entierro: «La Real Cofradía del Santo Entierro de Zamora. 1593 – 2012.», del autor Florián Ferrero.

José Laguno, presidente de la Asociación Cultural La Urna, ha estado al frente de la publicación del libro y fue el encargado de la presentación del acto. Laguno destacó que, en el s. XIX, una riada terminó con el fondo documental de la cofradía y gracias a Florián Ferrero se ha recuperado parte de esa historia.

El libro, maquetado por Questión de Imagen e impreso por Cícero Artes Gráficas, consta de «490 páginas detrás de las que está el amor a la cofradía», en palabras del propio autor.

Esta publicación pretende promocionar la obra social de la Cofradía del Santo Entierro y las actividades de la Asociación Cultural La Urna, según indicó el autor durante la presentación.

Hace 30 años Florián terminó lo que podría considerarse como una primera edición de este libro, que tardó 5 años en ver la luz (impresa por Imprenta Raúl, precursora de la actual Cícero Artes Gráficas). Aunque la cofradía le pidió hace años una segunda edición, ésta nunca vio la luz. Sin embargo, ahora, tras un gran trabajo documental, tenemos entre las manos una nueva edición del libro con la historia de la Cofradía. Esta edición incluye todo lo que aquella primera incluía y todos los datos relevantes descubiertos durante los años transcurridos entre la publicación del primer volumen y la publicación de éste.

Ahora sabemos más de las numerosas cofradías que rendían culto al Santo Entierro, no sólo en Zamora, sino en otras provincias. Así, por ejemplo, en Salamanca era la Vera Cruz la que organizaba todos los actos. En Zamora llegó a haber hasta 3 cofradías de la Vera Cruz y hubo varias también del Santo Entierro que la cofradía actual absorbió o eliminó. La Cofradía en sus inicios salía de San Esteban e iba a San Ildefonso, donde entraba, y subía por Balborraz para volver a San Esteban. Los grandes pasos hicieron que ya no se pudiera entrar en San Ildefonso y se decidió llegar a la Plaza de los Ciento y después a la Catedral. A la vista de todo ello, Florián Ferrero decía ayer durante la presentación que «no debemos tener miedo a los cambios de itinerarios, sino que se debe tener en cuenta el fin de la cofradía». Tal como destacan algunos medios, el autor también pedia que se salga desde un oratorio, por ejemplo desde el espacio libre en el Museo de Semana Santa.

Tal como se demuestra en el libro, a lo largo de los años se han producido infinidad de cambios en la cofradía, se han bendecido numerosos pasos que ahora no procesionan, se han cambiado mesas y uniformidades (en algún momento se llevaba un sombrero de ala ancha, similar al de Barandales), existieron hermanos de sangre (se disciplinaban) y hermanos de luz (no se disciplinaban) e incluso aparecieron niños vestidos de ángeles. En la actualidad se han recuperado algunos elementos históricos, pero, en palabras del autor «está bien recuperar aquellos elementos que sean recuperables».

Florián Ferrero, que ha donado a la cofradía los derechos de autor y la propiedad intelectual, recibió también en el día de ayer el premio de la Asociación Cultural La Urna. Este premio se suma al reconocimiento de la Cofradía de 1997, cuando Florián fue nombrado Hermano de Mérito de la Cofradía.

Al finalizar la presentación del libro, José Laguno entregó a aquellos que han hecho posible la publicación de este libro un pequeño obsequio a modo de reconomiento y un ejemplar del libro. Entre otros, Questión de Imagen también recibió su reconocimiento, no sólo por el esfuerzo realizado para la publicación del libro, sino también «sentimental» por ser el padre de José Miguel Herrero, director de Questión de Imagen, quién imprimió la primera edición del libro.

Si deseáis adquirir el libro podéis hacerlo en la Casa del Cofrade.